A cada instante surgen y se acumulan en el hombre incitaciones y
tentaciones que provienen de su interior y del exterior.
El no puede prestar atención a todas ellas al mismo tiempo.
Así que fija su atención solamente
en la más importante de todas. Esto se denomina concentración.
La concentración es necesaria para captar con precisión cualquier tema.
Dirigir intencionalmente la atención hacia un tema y fijarla en él, es
"fijación en un solo punto", lo cual también es un estado de la
mente. La concentración y la
fijación en un solo punto ayudan a enfocar el esfuerzo en la tarea elegida.
Tal "fijación en un punto" aumentará el poder y la habilidad;
no se podrá adquirir si antes no se conquistan los deseos mundanos que distraen
la mente. La fijación en un punto,
la conquista de la mente, se adquieren mediante el ejercicio de la meditación.